Visitando el Museo Nacional de Ciencia y Tecnología
Hoy quería hacer un paréntesis en la publicación de trabajos y compartir con vosotros una actividad que día a día practico más con mi hija: visitar museos. Como se acerca otro fin de semana largo y estamos en época de lluvias me parece una idea fantástica pasar a potenciar la imaginación que desarrollamos en parques y casas a estos maravillosos espacios que son los museos.
Es cierto que me encanta ir a las exposiciones fotográficas, ver colecciones de pintura…. pero sin duda me he dado cuenta que lo que triunfa para mi enana es tocar y en el MUNCYT tienen mucho de eso.
El Museo Nacional de Ciencia y Tecnología me impresionó desde el principio, es un edificio enorme por fuera y mágico por dentro.
En la planta baja tienen una parte dedicado a las exposiciones temporales y otra a lo que nosotros denominaríamos Vintage pero que ellos muy adecuadamente le llaman Sala de Patrimonio. Allí vuestros hijos pueden miraros como bichos raros al conocer los zapatófonos que utilizábamos, o entender el sentido de «caja tonta» cuando nos referimos a la televisión.
Al principio nos atrae lo más obvio y lo que menos tiene que ver con el museo
Pero con tesón consigues hacer que conecten con más cosas y empezar a despertar los sentidos
Cuando os hayáis visto todo podéis seguir la diversión en la planta de arriba y disfrutar ascendiendo la rampa con el lema que me imprimí para casa
EXPLORA, DESCUBRE, CREA
Creo que son conceptos y secuencias que nuestros hijos y nosotros mismos no debemos perder para seguir siendo el motor de cosas increíbles
Esta vez por novatos y porque queríamos descubrir el museo con unos amigos no nos quedamos en el microespacio, pero ya os digo que la próxima visita la estancia en este espacios de descubrimiento a través del juego está asegurado. Las personas que lo gestionan auténticos profesionales y ya desde fuera podías ver cómo lo estaban pasando de bien los pequeños exploradores.
Además es una oportunidad única para que nosotros, los mayores, sigamos viendo el museo con más clama y sacándole todo el jugo que tiene.
Una vez llegáis a la planta primera prepararos porque hay experimentos, juegos y conceptos muy difíciles explicados de una forma amena y sencilla.
Y ya por último en la plante de arriba el planetario. El colofón a una visita de 10
Espero que os animéis y me contéis cómo ha ido o nuevas sugerencias para seguir descubriendo y explorando lo que nos rodea.
P.D. Os dejo los enlaces de unas recomendaciones geniales para el post-museo. Una heladería (SoloNaturale) para chuparse los dedos y un lugar de comida orgánica
Hasta la próxima semana