¿Existe realmente un momento para hacer una fotografía a tu bebé y que salga bien, sin importar el dispositivo que utilices?

Y quien dice bebé dice niño/a, adolescente….

Cuando voy a una sesión o hablo con algunos padres, siempre alaban mi habilidad para sacar fotos buenas de los niños. Claro, la cámara…quizás que están entretenidos con nosotros…pero la verdad es «que no paran de moverse» y así no hay manera.

Los niños, no voy a descubriros nada que no sepáis muchas, son entes en continuo movimiento. Hasta cuando están parados, puedes ver sus ojos moviéndose de lado a lado pensando ya en su siguiente movimiento. Pero yo no quiero niños seta, a mi me gusta que los niños sean niños, que los bebés muevan sus ma

nos intentando agarrar algo, que vayan gateando como el mismísimo flash o que no sepan caminar….solo correr para ir de un punto a otro.

Lo que pasa es que en estas situaciones tener solo el móvil disponible para sacarles una foto puede presentarse como una desventaja, porque no tienen tanta capacidad para congelar su movimiento como otros tipos de cámaras donde podemos controlar la velocidad de disparo. Pero que nadie se me deprima, porque seas un profesional, un principiante o simplemente un padre entregado a la causa… hay un momento donde podemos conseguir LA foto perfecta.

LA SIESTA

Ese momento a medio día, cuando todavía hay luz natural entrando por las ventanas y todo su cuerpo se relaja, y tienes tiempo para observarles sin miedo a que se den la vuelta, salgan corriendo o empiecen a dar saltos sin parar.

Yo he de reconocer que el tema del sueño en mi bebé lo llevaba francamente mal, así que cuando ella dormía (15 min) la mayoría de las veces caía yo detrás de ella. Pero las veces en las que Morfeo solo atacaba a una de las dos, aprovechaba para acercar la cuna, el cuco o donde hubiera caído, a la ventana y aprovechar esa luz, deteniéndome en ajustar parámetros, probando distintos ángulos… así que aquí van algunos consejos para que aprovechéis este momentazo para capturar todos esos pequeños detalles de vuestros bebés o la expresión de las caras de vuestros hijos o, por qué no sus posturas imposibles o lugares únicos para caer rendidos.

1. La colocación.

Sabéis que soy enemiga de las poses anti naturales en recién nacidos, pero es verdad que cuando caen genuinamente dormidos se les pueden colocar las manos, los pies o la cabeza para que queden «mas recogidos». Mi consejo es, que si no os habéis formado para ello, saquéis el máximo partido a cómo ha quedado vuestro bebé dormido cambiando su postura lo menos posible.

       2. La luz

Como os decía, lo más importante es que se encuentren cerca de una fuente de luz natural (ventana o cristalera). Si su cama, cuna o cuco ya la tenéis colocada así, perfecto. Sino, el día que queráis hacer las fotos, preparad el tener el lugar donde vayan a dormir más cerca de esas ventanas para comenzar a disparar en cuanto se duerman.

Esta foto está tomada a contraluz. Aquí todo dependerá de lo que queráis conseguir o de la oportunidad que os hayan dado. Pero con una simple edición podemos conseguir dar más luz a la foto sin problema.

Procurad en lo posible no utilizar flash cuando fotografiéis a bebés, y si no queda más remedio que sea un flash que podáis dirigir al techo o pared para utilizar la luz rebotada y no la directa.    

   3. Acércate con el zoom

Aunque las fotos de profesionales parezca que estábamos pegados al bebé, generalmente el efecto se ha conseguido a través de lentes de largo alcance o tirando de zoom. De esta manera conseguiréis ese efecto de desenfoque que tanto gusta y sobretodo evitaréis distorsiones provocadas por la lente cuando se encuentra muy cerca de los objetos fotografiados.

Esto con el móvil es distinto, ya que cuando hacemos zoom perdemos calidad en la imágen, pero ya son muchos los que integran funciones macro o de difuminación del fondo que podéis aprovechar para la creatividad en tu foto.

Así que ya sabéis, si tenéis la oportunidad, no dejéis de recoger estos momentos de paz y de tranquilidad…. son muy importantes para tirar de ellos en momentos de desesperación paternal 😉